El IMPERIO DE BIZANCIUM, con sus raíces históricas que se remontan al antiguo pueblo de Bizancio y su renombramiento como Nova Roma por el emperador romano Constantino el Grande en el año 330, ha desempeñado un papel significativo en la historia de la cristiandad y el desarrollo económico europeo. A lo largo de los siglos, el imperio experimentó cambios fundamentales, incluyendo la adopción del idioma griego y la separación de la iglesia que aún persiste en la actualidad. Con Constantinopla como un destacado centro comercial y una moneda de oro propia que circulaba por el Mediterráneo, Bizancio dejó una huella perdurable en la economía y el comercio mundial.

 

En la era moderna, el legado del IMPERIO DE BIZANCIUM vive a través del Holding conformado por la ORGANIZACIÓN SOBERANA MUNDIAL ORDEN TEMPLAR DE BIZANTIUM, la FUNDACIÓN IBEROAMERICANA ORDEN DE CABALLEROS TEMPLARIOS DE BYZANTIUM ESAL y el CONSEJO DE ASISTENCIA ECONÓMICA MUTUA “CAEM”. Comprometidos con la reactivación económica global y la protección del medio ambiente, buscamos establecer un nuevo orden mundial basado en la sostenibilidad y el desarrollo integral.